lunes, 2 de diciembre de 2013

GRUPO DE POESIA DE LOS SÁBADOS. 30-11-2013


GRUPO DE POESÍA DE LOS SÁBADOS A LAS 18:00 h
-revista virtual-
COORDINADOR :
MIGUEL OSCAR MENASSA (Candidato al Premio Nobel de Literatura 2010)
NÚMERO 128, 30-11-2013
Semana a semana iremos mostrando en este blog el producto del trabajo realizado en el Grupo de poesía los sábados a las 18:00 h de la Escuela de Poesía Grupo Cero, coordinado por el poeta Miguel Oscar Menassa

Dibujos: Miguel Oscar Menassa




GALOPE APASIONADO


El punto distorsiona la mirada
cuando galopo hacia tu nombre
el hechizo pierde sus enganches
y la rosa baila su gordura.

Vibrar y despegar,
armar  disciplinar
La melodía con su cauce de celosa victoria
se asienta en su instante favorito.

¡Toca mi palabra !
Estaré husmeando para ver si el reflejo
es contemplado
o cae en su autor.

Estaré para vestirme con ese borde de luz
que acerca los fuegos
donde hay calor para todos,
agitación en presente y futuro.

¡Gritar en la silaba!

El corazón desmedido abarca las armas,
no puede volver al tercero
enmudecio a la tarde,
antes de la bomba.
Clémence Loonis


GALOPE APASIONADO

Desde los límites que el placer impone
brotan el dolor petrificado  y el perecedero júbilo,
la lujuria más imperceptible y la lágrima que agoniza,
y sólo me mueve el galope apasionado.
No quiero una felicidad encasillada y sin historia,
ni una inefable y grotesca boca indiferente,
tampoco me interesa el ámbito geográfico
para  organizar  mis giros y mis vueltas,
quiero transformar este barro sonoro
 en frase impalpable  y en temblor de la carne.
¿Qué pretende el tiempo cuando quiere nombrarse,
cuando quiere alejarse, cuando cae fulminado?
¿Acaso no sabe que es el arco de mi flecha,
el camino de mi rumbo, la mano de mi brazo,
la voz de mi palabra? ¡Es tanto mi tiempo y tan poco!
¡Siempre  queda  el galope apasionado!
¡Rimbaud, dejo de esperarte y escribo!

Amelia Díez Cuesta



GALOPE APASIONADO

Los días transcurrían calculando
el rendimiento de los surcos
que se han de llenar
con el apasionado galope.

Al pie de carretera pensaba:
no está mal, ser un arado
y vislumbrar más que el espacio,
los territorios del tiempo
donde el hombre espera
mientras agoniza.

Hay belleza y gratitud
en la vitalidad del pan nuevo
y sus sabores acelerados
por sutiles espirales
de consumadas realidades.

En contacto con otros climas y abismos
florezco en la nieve y me sumerjo
en densidades de espejismos.

En trote apasionado vienen alientos
sobrepasando silencios.
Culminan la transfiguración del carbón
en brillos diamantinos.

Mis brazos extienden
rastros de tempestades
y la sed me lanza a existir.

Nuestros vientres sonoros
gestan latitudes de soles,
voces de islas donde reposa el alma.

Las distancias recorridas nos unen
porque el infinito no puede recorrerse a solas.

Es una férrea ligazón a la que obedezco
y al tallo de acuáticos tejidos,
en vidas desbordando
emulsiones cambiantes
contra lo que pueda oler a destrucción.

Allí, en la invocación del viento,
entrego mis vacíos.

Jaime Kozak


 

PACTO
El silencio
deja oír su melodía
los ángeles
de no se qué lugar
hablan
en mi corazón
se que la orilla
de cualquier camino
puede ser un canto
y la magia desaparece
de mi barrio
y me quedé sin camino.
Hagamos un pacto:
desapareces el tormento
que taladra mis sienes
yo
me pego la sonrisa
ato mi mano al bolígrafo
hasta el último día
de mi existencia
Rosalba Pelle

GALOPE APASIONADO

Hoy se presentan cuatro libros de poesía en Madrid. 
¿En Madrid dice usted? 
¿cuatro libros impresos con depósito legal? 
¿de poesía? 
Vengan, tomen asiento y escuchen declamar al universal idioma. 
Pasen y vean, la señorita de la primera fila, atuse su cabello de fotografía 
el caballero puede depositar aquí el sombrero y en secretaría adquirir 
el volumen del galope en los sueños.

El último que toque la campanilla!!!  
ya descienden del camerino los artistas elegantes
 llegan los autores con su destino vocal de vecindad.

La vernácula epidemia que se instaló en el sur de Europa, el siglo pasado,
Se transmitió como el amor celeste entre las mujeres y los hombres
crecieron sobre la tierra cantando al compás de un verso cada día y
buceando bajo el sol hermano una nocturna canción.

Galope apasionado cuatro libros de poesía desde Madrid y nos prometen repetir.Poetas en nuestras tierras. Identifíquense.
 
Vengo de un País. 
Melodías del Vértigo. 
Refugios Instantáneos. 
Huracanes Dormidos.    
Carlos Fernández
 
 




GALOPE APASIONADO
Hoy preferiría no escribir, tal vez, para no insultar
todo lo que me separa de la quietud,
de la ventana abierta sobre el monte y la luna
que ilumina generosa la habitación
donde me encontraba con el terror
y que tanto ame con el amor de las bestias.

Susana Lorente


GALOPE APASIONADO

No dormí,
escuché el ruido de la relojería alterando el espacio
y escupí los pedazos de vidrio azogado
en el estrecho camino
que inventaba metáforas .

Plata muerta,
y me bamboleaba de una orilla a la otra,
y embarraba mi corazón que nadie lavaría sino el tiempo.

Dueña de mi prisión, y envuelta por la noche
salí al camino donde rodaban las palabras como piedras
sin mirar para atrás
escuchando el silencio donde el sí y el no jugaban su partida

Vienen por mí,
y huyo de ese galope apasionado que quiere pasar por mí
y me retuerzo
y desafío al viento y su sentencia
con un rayo en mis ojos.

Una música saliendo de la hendidura de mis párpados
inclinó mi cabeza hacia la vida
y entre presagios enterrados en un país de lluvias
la pasión se levantó como tallos de la noche
y una alquimia de nubes me hospedó entre las sábanas
y me acosté a su lado para engendrar las sombras.

Los espectros del futuro
le cedieron el paso a aquel poema,
que sobrenadó mis lágrimas oscuras,
y pude amarlo hasta verlo crecer
a la luz de una estrella de versos.


 Norma Menassa


GALOPE APASIONADO


¿Qué se puede escribir con estas letras coronando la página?
un soneto de amor apasionado, de choques entre cuerpos,
y gemidos y, sin embargo, hoy estoy de un blanco riguroso.
Hoy se trata de asesinar la nada. Me persigno en idiomas ignotos,
y enlutada, escucho ese réquiem que me hace vibrar últimas cuerdas.

Quiero conquistar extensos latifundios, planicies
donde el sol no se ponga, con mis versos.
Quiero, caballo desbocado, desbordar las praderas de trotes imposibles.
herraduras del tiempo marcadas por el fuego de la letra.

Era algo pequeño lo que brillaba entre las manos,
pero tenía un valor incalculable: diamantinas perlas como versos,
estrofas de paciencia abotonada a la muerte.
Miré a dios frente a frente, y le dije: no creo en ti,
ni en tu inútil doctrina donde reinan hermanas culpa y sangre.

Se me agotó el silencio, se me cayeron los bolsillos de esconder
en ellos el deseo, de guardarme los labios para no decir: amo,
y ser amada no existe, porque ¿quién sabe lo que el otro puso en mí?
Ametrallada lengua, sigue cantando a pesar de las perforaciones,
la sangre desparramada, es otra palabra que mancha la virginidad de la mañana.

Galope apasionado, de mi cuerpo surgen últimos suspiros,
restos fósiles de almas, estalactitas del goce y del deseo,
finjo fingir, y arrebatada, me lanzo contra el mundo
en caída libre, pero sé que caer es imposible,
el poema sostiene todo lo que se extingue.

Mi sexo, herrumbre de siglos perdido en la maleza,
calcificado por las conspiraciones del mal uso.
Sé que soy un espejo de muerte y de mutilaciones,
sé que sobre ti, siembro la angustia.
Diferencia mortal,  lanzo los dados,
Sale el número cuatro. No puedo más. 
Esta es la última amenaza.

Alejandra Menassa de Lucia.
 

GALOPE APASIONADO

Tendido, sobre la crin del animal que no conoce su destino,
se deja llevar, herido, el hombre, de incultura.
Trota la bestia atravesando las veredas
donde aguardan los tesoros del saber.
No se detiene, entregado el pasajero al viaje,
sólo queda la caricia del veloz casco
sobre la hierba, ya seca de esperar.

Vociferan las palabras acechando las gargantas,
miradas extraviadas que se dejen seducir.
Preñados de nadas sólo unos pocos podrán escapar,
llega el poema, y yo desaparezco.

Helena Trujillo.




GALOPE APASIONADO

Frente a la suntuosidad del mar
el galope de los cuerpos iridiscentes
de los cuerpos amándose desnudos
en la arena de los encuentros y la dicha.
En la otra orilla, el corazón de oro anaranjado
la luna rota haciéndole señas al olvido
augurando tiempos donde la felicidad es calma o tempestad.

Ruge apasionada mi cornamusa.
Galopa al encuentro de la belleza
del brillo de la lágrima
detenida en la memoria.

El alma planetaria
distingue en la oscuridad
esa luz que es el aíre apagado
del frescor ardiente del amor.
Esa soledad que yace entre ambos
muge desconsolada rasgando la mirada
ciega
embriagada de sí misma.

No por partir se llega al árbol delicado
ni al pecho tenue de la respiración,
Se parte al ascenso.

Latido universal
Las formas atmosféricas
relucen en la oscuridad.

Formas como cuerpos consumados
como palabras rojas de pasión
ahuyentando los espíritus de la decadencia.

Combinaciones inverosímiles de seres
pétreos, cobran vida
en el calor de los versos.

Son tumultos insondables
Soslayando la inmensidad del mar
en las vertientes
de los fríos paisajes corporales.

Estrellas firmadas por el viento
en un beso
de vértigo intemporal.


Virginia Valdominos

GALOPE APASIONADO


Diría el viento que me empujaba
con esfuerzo a mi destino,
pero era yo quien iba dando
tumbos como una piedra
que se desprende
desde su cuna milenaria
de átomos inmóviles.
Viéndome caer
pensaría que buscaba
con entusiasmo
el fondo de las cosas,
el alma sumergida del río.
Pero era el abismo
el que daba nobleza
a mi destino.
Galope apasionado,
con el vértigo
me sostengo en el aire.


Ruy Henríquez

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